La neige veut arriver

Oh là là, la nieve está llegando de a poco para instalarse en la ville durante estos próximos largos meses. Esta foto es del invierno pasado. Hoy a la tarde estaba escribiendo un e-mail-chat con "uno" de España y "otra" de Argentina, (porque esto ya no es mandar un e-mail y listo, es mandarlo y recibir dos juntos a los tres segundos como respuesta y volver a mandar y así sucesivamente, y que antes de ayer conté y llegaron a ser 35 e-mails en menos de 20 minutos, cosas que hacemos los que estamos locos) y como tengo la máquina justo pegada al ventanal, miré dereojo y vi que estaba nevando. Cuando me asomé a la ventana, dije: llegaste turrita. Y sí, lo mismo que veo todos los inviernos, pero cuando uno ya se había olvidado de ver nieve, vuelve. Y qué sé yo, me gustó ver que haya llegado de nuevo. Un poco nomás...
Todos los años cuando empieza a nevar, lo saco a Mirko para que marque sus patas en las primeras montañitas que se forman en el piso del balcón, este año está Fido.
Ya comienza la gente a meterse en sus casas (cuándo salieron nunca me enteré) y por suerte como adentro está todo calefaccionado ni se siente el frío, podés andar por tu casa en musculosa y shorts que no pasa naranja. Yo en estos momentos estoy con mis pantuflas turquesa (perdón? escuché risas) me pedí en lo de Napo el argentino que tiene un local en la avenida Saint Michel, una docena y media de empanadas de varios gustos, un tarro de dulce de leche ( veo que va a durar poco), ya me trajeron el pedido, unas películas para ver, tengo el pelo revuelto, los pantalones manchados de pastel (sigo pintando) y se acabó para mí el sábado. No pienso salir ni a la esquina.
Si hay que comprar puchos, tiramos la monedita.

Bon soir

Mise à jour

Antona amigo, acá te dejo algo para que te rías más aún. Las pantuflas te las debo, ya te las voy a mostrar cuando tenga el cable de la cámara que estoy esperando.