Volviendo con varios temas

Acá estamos, después de diez días de "relax mental"(?), estomacal y demás tensiones, agradezco los lindos e-mails que recibí (parece un programa de TV) pero es así, algunos preguntando que si estaba viva, pedidos de que vuelva, etc, hicieron que me presente de nuevo antes de tiempo, igual les aviso: sigo con el relax, ojo al piojo, pero posteando al fin che. Como verán Mis a Jour tiene nueva plantilla, y bue, año nuevo, ropa nueva. Como Blogger me empelotó porque no me deja cambiar a la nueva versión (ah, ésto ya lo dije en otro post) decidí cambiarlo igual, capricho y rebeldía son mis apellidos. Así que, díganme que sí que les gusta porque no lo pienso cambiar.

Repasando un poco sobre las cosas que podemos encontrar acá dónde vivo, por ejemplo, no existen las rejillas en el piso, o sea, en las casas no hay rejilla de desagote del agua, es decirrr, que acá se usan los "mapos"o "mapas", según cómo lo digan en cada país, no existe el secador y el trapo de piso como usamos allá, se pasa el mapo, se junta el agua y se escurre en un balde.

Otra cosa, no en todo Canadá, pero normalmente aquí se usan las cocinas eléctricas en casi todos los hogares, salvo en restaurants o centros de eventos que cocinan con gas, pero no es habitual verlo en un hogar común. Cocinar en el horno eléctrico, no saben que lindo que es (?), no mentira, las milanesas te salen re secas, un poco duras y que si no elegís carne tierna, tenés que cortarlas con serrucho. Con ponerle un poco más de aceite a la asadera, listo, safa.Otra cosa más, las puertas de los negocios se abren al revés, de adentro para afuera, no en las casas, sólo en los locales. Ya ni llevo la cuenta de cuántas veces me golpeé la frente. Como algunos ya saben, vivo en un barrio puramente italiano. Se le dice La Petite Patrie, según las estadísticas más recientes (2001), se evaluaba a la población italiana en el 45%, seguida de 30% para los francófonos y de 20% para los anglófonos. A qué viene ésto, que es uno de los barrios más grandes de Montréal y con la gente más cálida ( por qué será se darán cuenta).
El italiano instaló su bandera desde hace más de 30 años y de ahí no se movió más, y ahora están abarcando otros sectores de la isla, si pasaran frente a un restaurant italiano se darían cuenta porque adornan sus entradas con miles de banderas.
Lo que me jode terriblemente es que cuando estás por alquilar un depto, el conserje te invita a verlo pero con la gente viviendo todavía dentro, el tipo te abre la puerta de tu casa y pasa con los visitantes a mostrarles los ambientes, me ha tocado ir a cada lugar, tenía que andar esquivando medias en el piso, botellas de cerveza en el camino, y verdaderamente resultaba medio incómodo bueno, pero ésto me pasó apenas llegué.
En otro post seguiré contando.